El sistema de altavoces Smart IP de Genelec elegido para The Bar en la Penn Station de Nueva York

El proyecto más reciente de Danny McDonald, restaurador y partidario de Genelec desde hace mucho tiempo, es The Bar en el nuevo Moynihan Train Hall de Penn Station en Nueva York, y ha elegido el 4430A de Genelec para asegurarse de que suene tan bien como parece.

Danny McDonald, uno de los principales empresarios de pubs de Estados Unidos y uno de los restauradores más conocidos de Nueva York, es conocido por ser un experto en el desarrollo, la construcción y la explotación de pubs modernos. Empezó en 1995 con el Swift Hibernian Lounge, que según Crain’s New York «revolucionó el panorama de los bares irlandeses» de la ciudad, y su cartera creció hasta incluir Puck Fair, Ulysses’ Folkhouse, Pier A Harbor House y The Dead Rabbit. Ahora, la última aventura de McDonald, llamada simplemente The Bar y situada en el Moynihan Train Hall de Manhattan, continúa su serie de tabernas de éxito, ésta en la recién renovada Penn Station, bajo el edificio de correos James A. Farley, de diseño Beaux Arts. The Bar, un elegante local de nogal oscuro y latón pulido, es la pieza central de la zona de restauración del Hall. En consonancia con su constante búsqueda de lo mejor, McDonald eligió los altavoces de Genelec para proporcionar el aspecto sonoro del ambiente cuidadosamente estudiado del establecimiento. Estos altavoces ofrecen alimentación, señal de audio y gestión de altavoces a través de un único cable CAT estándar, lo que contribuye a simplificar la instalación y la gestión del cableado.

En concreto, 10 de los altavoces de instalación Smart IP 4430A de Genelec fueron instalados en The Bar por Osbee Industries, Inc, un integrador de sistemas con sede en Harrison, Nueva York, especializado en proyectos de alta gama. Los altavoces Genelec están empotrados en el techo de la zona del bar y soportan las ocho pantallas de televisión que hacen de The Bar un lugar elegante para ver deportes. El sistema audiovisual, diseñado por Osbee, está totalmente conectado en red, con control Crestron y procesamiento Symetrix, y los altavoces 4430A están conectados a esa red a través de Dante®. «Los altavoces Genelec, que Danny ha utilizado muchas veces antes en sus restaurantes, eran la elección perfecta aquí«, dice Dave Raines, presidente de Osbee. «Son compactos y encajan en el plafón de madera sobre la barra de tal forma que son prácticamente invisibles, pero aún así tienen una gran potencia de salida. Son compatibles con Dante, así como con estándares de transmisión abiertos como AES67, por lo que se pueden conectar en red, y también tienen funcionalidad PoE, lo que agiliza el diseño del sistema. Además, suenan de maravilla, así que cumplen todos los requisitos«. De hecho, ésta era la primera instalación de Genelec en Osbee, y Raines quedó muy impresionado con la facilidad de instalación y el rendimiento de las Genelec. «Era la primera vez que utilizábamos Genelec, pero le aseguro que no será la última. Es un gran altavoz de instalación«.

Danny McDonald sabe de hostelería, pero también sabe que no se limita a la comida y la bebida. «Queremos que el ambiente de los restaurantes y bares refleje la época, los lugares y la gente«, afirma. «Queremos que se adapten al momento«. En The Bar, al otro lado de la Octava Avenida, frente al Madison Square Garden, eso significa que el local pondrá música y proyectará vídeos que complementen lo que muchos clientes han venido a ver, ya sea un partido de los Rangers o un concierto de Billy Joel. «Ahí es donde realmente brillan los Genelec«, afirma. «Tienen calidad de monitor de estudio, por lo que el sonido es excelente. Aquí tenemos música acústica, como jazz los miércoles, y los Genelec le dan un sonido de élite«. Pero lo más importante es que los Genelec ayudan a fomentar el ritmo social natural de la sala. «Lo llamamos ‘conversación coreografiada«, explica. «Si la gente grita para llamar la atención del camarero, lo hace para superar el volumen del sistema de sonido. No tiene por qué ser así. Colocamos los Genelec a una distancia aproximada de dos metros y medio, y así se crea el equilibrio perfecto: estás rodeado de música pero puedes hablar con facilidad, sin tener que gritar, y aun así sigues percibiendo el impacto de la música. Eso es lo bueno de los Genelec. Nos permiten conseguir el ambiente adecuado«.

Para más información, visite www.genelec.com/smart-ip